El mercado actual requiere de presencia digital. Cada vez más empresas que venden bienes y servicios en el mundo físico, hacen lo propio en internet. Aunque algunas compañías usan su presencia en línea solo para que la marca impulse las ventas en el canal tradicional, este caso es cada vez menos común. Incluso las marcas de lujo, reacias por naturaleza a canales masivos, están vendiendo sus productos directamente a los consumidores.El e-commerce ya no se trata solo de tener un sitio web; los jugadores más exitosos comprenden la necesidad de diferentes tipos de experiencias: aplicaciones, B2B, B2B2C, etc. En el futuro, por ejemplo, la idea es integrar el digital commerce en "cosas" (comercio IoT) con pagos seguros y sin fricciones.
La diversidad de canales, experiencias y el músculo financiero de los grandes jugadores hacen que el digital commerce sea extremadamente competitivo. Esta competencia -en muchos casos- genera pequeños márgenes y obliga a las empresas a crear experiencias de compra efectivas y fáciles, lo que le permite a las personas tener diferentes experiencias de e-commerce con ciertos objetivos específicos como conocer el producto, leer reseñas, comparar precios y finalmente comprar.
Cada una de estas interacciones deja una marca medible con datos que tienen que ver con quién visita un digital commerce, cuándo, qué páginas ve y cómo llegaron. La huella también se extiende al comportamiento del usuario: interacciones, eventos, productos vistos, promociones utilizadas, tiempo dedicado, diferentes rutas de navegación, valor del pedido, método de envío e información de pago.
Prácticamente todas las acciones del usuario se miden y rastrean y son trascendentales para un e-commerce, según establece Forbes. De ahí la importancia de comprender la oportunidad de utilizar estos datos de forma exhaustiva y centrada en los resultados empresariales.
Los datos sobre toda la experiencia se pueden capturar, medir, analizar y proyectar para mejorar el rendimiento del negocio y automatizar la toma de decisiones. Todo este proceso tiene el potencial de convertirse en un poderoso activo de la compañía. Un proyecto de alto impacto requiere un alto grado de articulación entre todas las áreas para recopilar, extraer, cargar, transformar y gobernar los datos.
Este proceso de articulación debe generar constantemente preguntas comerciales y responderlas con datos. Pero lograr resultados analíticos requiere pensar en el análisis como una cadena de valor que responde a la pregunta: ¿qué actividades debo hacer para garantizar resultados analíticos de calidad? Y para responder a esta pregunta, hay que empezar por:
La articulación de diferentes áreas del negocio es clave para identificar la pregunta más crítica para que el análisis tenga el mayor impacto posible y, en función de la priorización del problema, deconstruir los requisitos comerciales y las fuentes de datos necesarias. Por ejemplo, esta pregunta: ¿qué productos debo priorizar para maximizar las ganancias? El análisis aquí se centraría en el inventario, las marcas, los márgenes y los descuentos. Requiere una comprensión de los datos históricos y probablemente predecir el comportamiento futuro de ventas y estructura de costos.
Según una encuesta de Deloitte en empresas de mediano y gran tamaño en EE.UU, el 49% de los encuestados afirma que el análisis de datos les ayuda a tomar mejores decisiones; el 16% afirma que permite mejorar las iniciativas estratégicas y el 10% afirma que les ayuda a mejorar las relaciones tanto con los clientes como con los socios comerciales.
Por eso, el siguiente paso es desarrollar un plan de medición lo suficientemente detallado sobre cómo actuar. Este plan es un documento escrito que identifica el enfoque, los desafíos, los objetivos, las preguntas y los requisitos del proyecto. También debe detallar el tipo de análisis, el propósito, los datos necesarios, los modelos a probar, la audiencia, el cronograma y otros detalles. Debe apuntar a dejar claro cuál es el impacto económico de responder la pregunta comercial y cómo se medirá. Y cuál es la mejor manera de entregar el análisis a la audiencia y accionar los resultados.
El análisis, que comienza siendo exploratorio, se vuelve descriptivo y en algunos casos terminará siendo predictivo. En entornos de e-commerce -donde las recomendaciones de mejora se hacen continuamente- el uso de predicciones como entrada para el análisis prescriptivo responde a lo siguiente: dado lo que ya sé, ¿qué debo hacer ahora?
Tener éxito en el mundo del análisis no implica inversiones significativas de capital, sino más bien una estrategia de equipo que incluye todas las áreas de tu empresa y que le permite ser oportuno y priorizar soluciones y desarrollos que rápidamente y con gran precisión te lleven a aprovechar las circunstancias de un mundo que necesita cada vez más contexto y capacidad de reacción digital.
El análisis del e-commerce tiene que resolver muchos problemas, no solo porque es necesario cruzar los datos comerciales y tecnológicos, sino también porque responder una pregunta de alto impacto implica estar a la vanguardia de la experiencia digital y construir experiencias contextuales rápidas, personalizadas y convincentes para reducir la fricción al mínimo.
Si estás interesado en saber mucho más sobre digital commerce, sin importar si tienes un mediano o gran negocio, no dudes en consultar nuestro centro de recursos en el que encontrarás una biblioteca virtual y un blog que te mantendrán totalmente actualizado.
Por: Alejandro Gutiérrez -Director de Analítica en BlackSip